Islas Lofoten en Noruega
Las Islas Lofoten en Noruega son un cacho de paraíso en la Tierra, de verdad que sí.
De esos paisajes árticos en los que el mar y la montaña hacen una pareja tan perfecta que consiguen que se te salten las lágrimas de pura emoción.
En los confines del planeta, este archipiélago noruego de más de 2.000 islas es tu sitio si flipas con los fiordos, te gusta el frío y buscas un remanso de paz donde desconectar del mundanal ruido.
Además de mucho bacalao (luego te explicamos por qué), jerséis de lana a tutiplén y personas que se sonríen todo el tiempo, hay mucho que hacer.
Así que, sin más preámbulo, sumerjámonos en las Islas Lofoten en Noruega.
Las Islas Lofoten en el mapa
Seguramente has oído hablar de ellas o hayas visto fotos de esos cielos con el sol de medianoche que parecen de pega. Pero ni idea de dónde están, ¿verdad?
Las Islas Lofoten están frente a la costa norte de Noruega, a 100 kilómetros por encima del círculo polar ártico y se conectan al continente por un puente de un kilómetro de largo. O sea, que son una especie de archipiélago.
Esta cadena de islas, que están conectadas entre sí por un entramado muy curioso de puentes y túneles bajo el mar, está compuesta por seis municipios:
- Vågan.
- Vestvågøy.
- Flakstad.
- Moskenes.
- Værøy.
- Røst.
De todo el territorio de las Lofoten, las principales ciudades son Leknes y Svolvære, su capital y un lugar donde la luz tiene un no sé qué gracias a la refracción de los rayos solares en ese cielo.
Y es que la luz en las Islas Lofoten en Noruega es clara y sencilla, de esas que hacen que todo se vea como muy limpio y vívido.
Te debes estar preguntando cómo llegar a este remoto lugar del mundo.
Pues vuelo directo desde España no hay, claro. Lo más habitual y cómodo es volar a Oslo y desde allí hasta Bodø, donde puedes coger un ferry hasta las islas.
Ahora que ya sabemos de quién estamos hablando, pasamos a la acción.
El ABC de las Islas Lofoten en Noruega
Lo que te espera en las Islas Lofoten en Noruega son profundos fiordos, senderismos impresionantes, pueblecitos pintorescos donde los haya, auroras boreales, ballenas… ¡Tantas cosas!
Vayamos por partes.
Ciudades y pueblos de postal
Ojo con estar pensando en grandes urbes de edificios altos y una alta densidad de población porque si hay algo que no vas a ver en las Islas Lofoten en Noruega es precisamente eso. Ni siquiera en la capital.
Como es lógico las Lofoten están llenas de pueblitos pesqueros rodeados de montañas.
Sus habitantes son gente sencilla y superamable que vive en casitas de madera de las que en pleno invierno raramente sale, porque las temperaturas son, vamos a decir, interesantes.
Estas casas tradicionales de los pescadores llamadas rorbru son preciosas. En los últimos tiempos se han convertido en un atractivo en sí mismas y también alojamiento habitual de los viajeros.
¿Qué pueblos tienes que visitar sí o sí?
Difícil elección, para qué vamos a decir lo contrario.
Pero como hay que mojarse, este es nuestro top five de pueblos y ciudades que ver en las Islas Lofoten:
- Reine es uno de los pueblos más espectaculares porque está construido sobre islotes y las montañas a su alrededor son majestuosas.
- Unido a Reine por un puente está Hamnøy; es el típico pueblo pesquero que nos imaginamos cuando pensamos en la Noruega más remota y donde salen unos fotones increíbles.
- Henningsvær o “La Venecia del Norte” está en la lista porque es una aldea donde igual puedes charlar con pescadores auténticos que conocer al clásico hípster apasionado del arte.
- Svolvær, además de ser la capital y donde más servicios hay, tiene un puerto muy bonito y un paisaje montañoso que vale mucho la pena.
- Kabelvåg está muy cerca de la capital y es un municipio digno de visita sobre todo por su gran iglesia de madera (con capacidad para 1.200 personas), considerada la catedral de Lofoten.
Los fenómenos de los cielos de las Islas Lofoten en Noruega
En estas islas noruegas tienes la oportunidad de contemplar dos de los fenómenos naturales más impresionantes del planeta:
Las auroras boreales
Si hay algo que hacen especiales las Islas Lofoten en Noruega es su ubicación ideal para la observación de las auroras boreales de octubre a marzo.
Pero, ojo, si quieres disfrutar de la magia de la aurora boreal en las Lofoten y no morir en el intento, evita ir los meses de noviembre, diciembre y enero porque hace un tiempo de perros; el frío en estos meses es brutal, abundan las tormentas y la lluvia es el pan nuestro de cada día.
Si quieres acertar, el mejor mes es octubre.
Hay pocas experiencias en la Tierra tan emocionantes como contemplar este fenómeno. De hecho, cada vez hay más gente que solo va a las Islas Lofoten en Noruega atraída por sus juegos de luces de colores, que van del verde al rosa o al morado y que tantas leyendas y mitos han originado.
Noches de sol
Otro fenómeno que puedes experimentar si vas a las Islas Lofoten de mayo a julio son las noches de sol o sol de medianoche.
Como su nombre indica, durante el verano nunca anochece del todo.
Si eres de los que se pirran por un atardecer y su paleta de colores en amarillos, naranjas y rojizos, aquí puedes vivir las puestas de sol más largas de tu vida (si te gustaría vivir así o no, ya es harina de otro costal).
El pescado
Sí, sí, como lo oyes: como te avanzábamos al principio la cultura del pescado, y sobre todo del bacalao, lo inunda todo en estas islas noruegas.
En las Lofoten todo gira alrededor de la pesca y de la producción de bacalao seco.
¿Por qué?
Pues resulta que estas islas son el lugar perfecto (ni muy frío ni muy caluroso y con el punto justo de viento) para la elaboración de un bacalao seco con denominación de origen.
Es un producto que se exporta desde los tiempos de los vikingos y del que sigue viviendo la mayoría de la población; por eso está por todas partes.
Desde luego que está riquísimo y lo puedes comer de mil maneras (frito, crudo, con tomate o como seas capaz de imaginar) pero lo más chulo es ver cómo lo secan en racimos colgados de unas estructuras gigantes hechas con madera de abedul.
Bueno, eso y degustar su caviar, que está tremendo también.
Pero no creas que solo tienen bacalao, de eso nada.
Además puedes comer gambas −pequeñas y saladas como las pipas−, salmón, arenques y hasta ballena, que para eso es una zona donde los cetáceos abundan.
Empieza ya a preparar tu viaje a las Islas Lofoten en Noruega
Tras este recorrido por el ADN de las Islas Lofoten en Noruega solo queda una cosa importante: organizarlo todo con tu Cuaderno de viaje para que allí no pierdas ni un minuto y te dediques en cuerpo y alma al destino.
¡Buen viaje!
